La Cámara Argentina de Comercio y Servicios se ha venido oponiendo en los últimos diez años en el Congreso de la Nación a un cúmulo de proyectos de leyes laborales que, lejos de proteger al trabajador, lo perjudican, ya que no buscan garantizar la integridad de su salud, el trabajo digno y el salario justo, sino que, por el contrario, persiguen el mero resarcimiento económico vehiculizando su obtención mediante la facilitación del reclamo judicial.

La CAC considera que las manifestaciones del Sr. Presidente no constituyen meras cuestiones de oportunismo político, sino que tienen, por el contrario, su origen en una patología de larga data.

Tampoco comportan ataques al Poder Judicial, menos aún al fuero del trabajo, ni a sus jueces laborales de carrera que, desempeñando su función durante largos años, los han venido haciendo con gran honestidad, prudencia y eficacia técnica.

El gran daño no solo repercute en el trabajador como ser humano, al cual paradójicamente se pretendería proteger, sino también en el sector PyME –la parte más numerosa y débil del sector empresario-, destruyendo dichas empresas como fuente de trabajo y generando desocupación.

La entidad apoya las reformas impulsadas por el Poder Ejecutivo para eliminar estas condiciones abusivas que traban el crecimiento y el bienestar de nuestro país.